Los Alimentos Procesados ocupan la gran parte de las
estanterías centrales de los supermercados. En casi todos los hogares se
consumen de manera habitual, ya que tenemos poco tiempo para cocinar y nos
hemos acostumbrado a sus sabores. Son
alimentos artificiales, que alteran claramente el terreno biológico y disminuyen la
carga negativa de los glóbulos rojos. Además
son altos en formas micóticas y micotoxinas y
están repletos de ingredientes
dañinos, de los cuales los peores son:
1. Edulcorantes Artificiales
Los Edulcorantes Artificiales aportan sabor
dulce a nuestros alimentos. Los últimos experimentos han llevado a la conclusión de que el
sabor dulce, independientemente del contenido calórico, aumenta el
apetito y han demostrado que consumir edulcorantes artificiales causa un aumento de peso mayor,
que el ocasionado por consumir azúcar.
Aun así el consumo de azúcar es
muy nocivo, perturba nuestro terreno
biológico y favorece las micosis.
El Aspartamo es el peor de todos estos edulcorantes artificiales, ya que es
una neurotoxina de sabor
dulce, cuyos aminoácidos atacan las células corporales, e incluso cruzan la
barrera hematoencefálica para
atacar a las células cerebrales,
generando excitotoxicidad.
Otros como el acesulfame de potasio, la sucralosa y la sacarina, también son muy nocivos para la salud. La sucralosa está relacionada con
la enfermedad intestinal, ya
que inactiva las enzimas digestivas y
altera la función de la barrera
intestinal. Además, puede destruir el 50%
del microbioma.
2. Grasas Trans
Sintéticas
Las Grasas Trans han sido relacionadas con
múltiples problemas de salud, entre ellos el derrame cerebral isquémico en mujeres postmenopáusicas. Otros
problemas relacionados con su consumo son: El cáncer, ya que interfieren con las enzimas corporales que son utilizadas para que este desaparezca; Diabetes, ya que interfieren con los receptores de insulina en las membranas
celulares; Función inmunológica
baja, ya que reducen la respuesta
inmunológica; Problemas reproductivos, ya que interfieren con las enzimas necesarias para producir hormonas sexuales; y Enfermedades cardiacas.
Son comunes en los alimentos
que contienen aceite vegetal
parcialmente hidrogenado, algunos ejemplos son las galletas, patatas fritas, la mayoría de los productos
horneados del supermercado, cualquier otro alimento frito y
muchos más. Las grasas trans sintéticas son conocidas por promover la inflamación, que es el
sello distintivo de la mayoría de las enfermedades
agudas y/o crónicas.
3. Saborizantes
Artificiales
No se conoce realmente a que se aplica el término de Saborizante Artificial. La etiqueta en
la que lo encontramos podría indicar que contiene un aditivo artificial o que contiene una mezcla de cientos de aditivos. Por ejemplo, el saborizante artificial de fresa puede
contener cerca de 50 ingredientes
químicos.
También puede tratarse de diacetil, un saborizante muy
dañino para la salud cerebral,
relacionado incluso con el alzhéimer
y que da sabor a mantequilla a las
palomitas de microondas o de potenciadores
del sabor transgénicos.
4. Glutamato Monosódico
(MSG)
Este potenciador
de sabor se
encuentra en un sinnúmero de productos
procesados que van desde comidas
congeladas, aderezos para ensalada hasta chips y carnes. El MSG es
una excitotoxina, lo que
significa que excita en exceso las células cerebrales hasta el punto de matarlas, lo que causa daño
y disfunción cerebral. Los problemas
de aprendizaje, el alzhéimer, el Párkinson, la enfermedad de Lou Gehrig y
otras están relacionadas con su consumo.
5. Colorantes
Artificiales
Nueve de los colorantes
alimentarios que
actualmente están aprobados para uso alimentario están relacionados con
problemas de salud que van desde cáncer
e hiperactividad hasta reacciones alérgicas.
Por ejemplo:
El colorante rojo #40, que es el colorante
más utilizado, podría acelerar la aparición de tumores en el sistema inmunológico de ratones, mientras que
también puede desencadenar la hiperactividad
en los niños.
El azul #2 utilizado en dulces, bebidas, alimentos para mascotas y
más, ha sido relacionado con tumores
cerebrales.
El amarillo #5 utilizado en productos horneados, dulces, cereales y
más, podría no sólo estar contaminado con muchas sustancias causantes de cáncer, sino que también está
relacionado con la hiperactividad,
hipersensibilidad y otros efectos en el comportamiento de los
niños.
A partir de Julio del
2010, la mayoría de
los alimentos en la U.E. que
contenían colorantes artificiales
fueron etiquetados con un mensaje advirtiendo que “podrían tener efectos adversos en la actividad y la atención de los
niños”. El gobierno británico también
pidió a los fabricantes de alimentos
que eliminaran la mayoría de los colorantes
artificiales en 2009 debido a problemas de salud.
6. Jarabe de Maíz de
Alta Fructosa (JMAF)
La Fructosa se metaboliza principalmente en el hígado, porque el hígado es el único órgano que
tiene la posibilidad de transportarla. Dado que esto ocurre si se lleva el tipo
de alimentación estilo occidental, que contiene mucha fructosa, esta termina dañando el hígado de la misma forma que lo hacen el alcohol y otras toxinas. Al igual que
el alcohol, la fructosa se
metaboliza directamente en grasa, es
decir, se almacena en las células
de grasa, lo que causa un malfuncionamiento
mitocondrial, obesidad y enfermedades relacionadas con la obesidad.
Cuanto más fructosa
o JMAF contenga un alimento y mayor sea el cómputo total de fructosa que se consume, peor será
nuestra salud. La recomendación estándar, para el consumo total de fructosa es de menos de 25 gramos al día. En el caso de la
mayoría de las personas, también, sería bueno limitar el consumo de fructosa de las frutas a 15 gramos o menos, ya que prácticamente
se tiene garantizado el consumo de más fructosa
de fuentes “ocultas”, si se toman otras
bebidas, además de agua y se consumen alimentos procesados.
7. Conservantes
Los Conservantes alargan
la vida útil de los alimentos, pero la mayoría de ellos están relacionados con problemas
de salud como cáncer, reacciones
alérgicas y más. El hidroxianisol butilado
(BHA) y el hidroxitolueno butilado (BHT) son conservantes que afectan al sistema neurológico, alteran el comportamiento y tienen
el potencial de causar cáncer. El terbutilhidroquiniona (TBHQ) es
un conservante químico tan mortal
que consumir tan sólo cinco gramos
puede matar.
Se ha descubierto que el conservante llamado benzoato
de sodio, encontrado en muchos refrescos,
jugos de frutas, aderezos para ensalada, hace a los niños más distraídos e hiperactivos. El nitrato
de sodio, un conservante
utilizado comúnmente en hot-dogs,
embutidos y tocino, ha sido relacionado con tasas más altas de cáncer colorrectal, estomacal y
pancreático…
Nada se precisa, pero sí sabemos que son aditivos innecesarios y peligrosos.
Consumir alimentos
procesados no es una opción segura ni sana para el ser humano.
Montones de estudios avalan esta conclusión y es algo en lo que todas las
dietas, que pretenden ser saludables, están de acuerdo. Los ingredientes aquí expresados son los
más conflictivos de todos los que podemos encontrar en las etiquetas.
Elige
con conciencia y elige lo mejor para ti.
https://acristofaro.com/sasha-czack-biografia-hechos-vida-familiar-del-fotografo-y-ex-esposa-de-sylvester-stallone/
ResponderEliminarEsta parasitosis llamada también Distomatosis Hepática, es una zoonosis común en animales herbívoros, y menos frecuente como enfermedad humana. Es una zoonosis de interés creciente en medicina veterinaria por su impacto económico en la industria (ganado bovino, ovino y caprino). Fasciola hepatica es un trematodo digenético con forma de hoja (parte anterior cónica y posterior ensanchada). Tiene un ciclo biológico complejo, los animales hervíboros y el hombre son los huéspedes definitivos y el caracol del género Limnaea es el huésped intermediario. El hombre se infecta accidentalmente